Alberto Fernández pidió la nulidad de la causa por violencia de género contra Fabiola Yañez tras el cambio de juez

Escrito el 19/10/2025

El expresidente, procesado y cerca del juicio oral, reclama que la investigación vuelva a foja cero. El expediente pasó al juzgado de Daniel Rafecas, a quien Fernández había propuesto como procurador general

En una maniobra judicial inédita, Alberto Fernández pidió que se anule por completo la causa en la que está procesado por violencia de género contra su expareja, Fabiola Yañez. La defensa del exmandatario sostiene que, tras el apartamiento del juez Julián Ercolini, todas sus decisiones quedaron sin validez y que el expediente debe volver a investigarse desde el inicio.

El reclamo fue presentado ante Daniel Rafecas, titular del Juzgado Federal N°3 de Comodoro Py, recientemente sorteado para reemplazar a Ercolini. Fernández propuso a Rafecas como procurador general de la Nación en 2019, cuando iniciaba su presidencia, pero el pliego nunca prosperó por la resistencia interna del kirchnerismo.

Procesado por violencia de género y amenazas

El expresidente enfrenta cargos por lesiones leves y graves agravadas por contexto de violencia de género y por amenazas coactivas. Según la justicia, Yañez habría sufrido agresiones físicas que le dejaron un ojo morado y moretones en un brazo. Fernández, en cambio, asegura que esas marcas fueron producto de un tratamiento estético mal realizado.

El fiscal Ramiro González pidió en agosto que la causa sea elevada a juicio oral y público, luego de que la Cámara Federal confirmara el procesamiento. En ese fallo, los jueces destacaron que existían "hechos concretos y objetivos" que demostraban una relación de desigualdad y violencia entre Fernández y Yañez.

Un pedido de nulidad total

La defensa, encabezada por Silvina Carreira y Yamil Castro Bianchi, presentó un escrito de casi 200 páginas para pedir la nulidad total del expediente. Argumentan que, una vez recusado Ercolini, todas sus actuaciones deben ser declaradas nulas y que el caso debe volver al punto de partida.

Los abogados cuestionan el origen de la prueba que dio inicio a la causa: un chat hallado en el celular de María Cantero, secretaria de Presidencia, dentro del expediente por los seguros del Estado, en el que Yañez relataba las supuestas agresiones. Para la defensa, ese material es “prueba contaminada y obtenida de manera ilegítima”, por lo que todo el proceso sería inválido.

El planteo incluye la nulidad del allanamiento, la imputación, la indagatoria, el procesamiento y el pedido de elevación a juicio.

Rafecas, en el centro de la escena

Antes de resolver el pedido, Rafecas deberá esperar a que venza el plazo de apelación al fallo que apartó a Ercolini, lo que ocurrirá el próximo martes. Si nadie recurre, el juez podrá asumir formalmente el control del expediente.

En ese momento podrían presentarse nuevas objeciones a su intervención, ya que Fernández lo propuso públicamente como procurador y ambos comparten vínculos académicos en la Facultad de Derecho de la UBA. En caso de que el magistrado decida mantenerse al frente, deberá definir si acepta o no el pedido de nulidad.

Yañez volvió al país con su hijo

Mientras el frente judicial se complica, Fabiola Yañez regresó a la Argentina hace dos semanas junto a Francisco, el hijo que tiene con el expresidente. Ambos habían residido en España tras dejar la Casa Rosada.

El reencuentro familiar se dio en medio de la causa y con la revinculación entre padre e hijo judicializada. En sus redes, Fernández publicó una foto con el niño y escribió: "El amor es más fuerte. El regreso de Francisco me llenó de felicidad".

"En modo Kafka": la defensa en primera persona

En el extenso escrito presentado ante Rafecas, Fernández incluyó un texto propio de 20 páginas en el que se comparó con Josef K., el personaje de El proceso, de Franz Kafka.

"Kafka nunca conoció Argentina, pero parece haber presagiado cómo funciona la Justicia Federal. Una corporación que solo se dedica a detener a personas inocentes e incoar procedimientos absurdos", escribió el exmandatario.

Y agregó: "Ahora me toca a mí. Otro 'K' que soporta cargos por hechos que jamás ha cometido y cuyo derecho a defenderse le ha sido negado".